Ultimátum es un grupo de
musica Punk surgido de las cloacas de Pamplona-Iruñea a finales de 1984.
Después de ‘colgar las
botas’ en 1986 tras registrar dos temas en el LP Condenados a luchar,
Mi primera
vez con Ultimatum fue en 1984. En diciembre, en plena antesala navideña.
Dicho
encuentro con la banda de Kutxa, Koko, Bolitxe y Potxeta tuvo lugar un sábado,
a hora temprana.
En el marco
de un concierto de protesta contra alguna decisión municipal. Sobre el
mediodía, con ellos en la plaza consistorial sobre un tablado
compartiendo brega con bandas de la época como Porkería T o los perennes
Barricada: “que hace un alcalde como tú en un sitio como este… Balduz, fatal,
siempre con problemas”, cantó el Drogas, versionando a Burning, aquella fría
mañana.
Poco más
recuerdo de aquel concierto: si acaso, que no llegó a terminar. O tal vez sí,
pero como el rosario de la aurora, intervención mediante de las Fuerzas de
Seguridad.
Como tantas
veces sucedía por entonces, en una época en la que todo estaba por descubrirse
y por hacer, el rock incluido, y en la que reivindicación, espíritu
festivo-rupturista y canciones iban de la mano.
A partir de
1985 fueron varias las veces que mis ojos quedaron como platos siguiendo la
urgencia de Ultimatum, llegando a ofrecer sus broncos conciertos los
citados, los R.I.P. de Iruñerria en mi opinión, incluso sobre el quiosco de la
plaza del Castillo (en unas tres ocasiones), en Lumbier (en medio de un gran
escándalo, con motivo de la presentación de la cinta Iruña for Katakrak),
en la plaza de Nabarreria (protagonizando una sonada actuación que terminó
disuelta a pelotazos) o en el Bidezarra de Noáin, abriendo para Kortatu,
Cicatriz y La Polla Records.
1986 fue un
año decisivo en todos los sentidos para ellos: para lo bueno y para lo malo;
¿lo mejor? El hecho de que tocaran en Carnavales programados por el
Ayuntamiento (la vieja estación de autobuses fue testigo de lo dicho, por
increíble que pueda parecer) o que tomaran parte en un disco compartido,
formato realmente al uso en la época: en el denominado Condenados a luchar,
aportando dos canciones: Ciudadano anormal y Sacrilegio.
O su
participación el 14 de julio en un contra-concierto organizado por las txoznas
sanfermineras en boicot a otro organizado en Antoniutti por el Ayuntamiento,
liderando el cartel Eskorbuto: sí, contratados por el Consistorio, habéis leído
bien; o, para acabar, el bolo que representó nuestra última vez, otoño de dicho
año, en el viejo frontón de Atarrabia. ¿Lo peor de todo? La constatación de que
aquello, pura materia bronca en estado bruto, no podía durar mucho.
La
inestabilidad de los últimos tiempos, trayendo ciertos polvos dichos lodos.
El final de
la aventura, pese a que 1987 viera un último intento de relanzar la nave en
fiestas de la Chantrea: enclave en el que, como si de los restos del naufragio
se tratase, comparecieron la mitad de Ultimatum y la mitad de Porkería T bajo
el nombre de Última Porkería, protagonizando una única y última
actuación.
Finalmente,
como trágico broche final, la muerte en 1994 de Bolitxe, condenado a luchar
contra algo contra lo que no podía…
Junio de
2011. Veinticinco años después, cuando pocos se acordaban de ellos, un buen
amigo, enorme sonrisa en ristre, me comentó que se iban a juntar los Ultimatum:
una indefinible mezcla de incredulidad y alegría me envolvió, imponiéndose esta
última. Una alegría que, cada vez mayor a tenor de la exhibida por mi
interlocutor, pronto despachó a su primera compañera: la de veces que analizando el actual devenir
de la escena, comentando los regresos de viejas bandas día sí, día también,
concluíamos nuestros devaneos con esta frase: ¡ ya sólo falta que vuelvan
los Ultimátum !
Pues bien,
ya están aquí. El reencuentro de Ultimatum con su pasado y de quien suscribe
estas líneas con parte de la banda sonora de su vida tuvo lugar el 26 de julio,
en las salas On-Off.
Allí,
expectante, fui testigo de excepción de la reunión de Kutxa, el vocalista, y
Potxeta, el baterista, con Julián y Gaizka, los nuevos guitarrista y bajista.
Del primer
ensayo de los renovados Ultimatum, y ¡ cómo sonó el único tema que tocaron!
¡Qué grandes Kutxa y Potxeta, con semejantes
fichajes respaldándoles!
Ultimatum vuelven a
calzárselas en 2011, con un fin: volver a pisar los escenarios, consumándose
con rotundidad su vuelta,
tras 25 años de ausencia, en enero de 2011.
Posteriormente, espoleados
por tal regreso, dicho único objetivo dio paso a otro, grabar sus legendarias
canciones.
Sus viejas pero no
perecederas composiciones, sueño que el grupo comandado por Kutxa y Potxeta
(actualmente a las baquetas en Lendakaris Muertos), reforzado por las
incorporaciones de Julián, a las guitarras, Gaizka, al bajo, y Pepo, a la
batería –en los directos-, terminó de hacer realidad antes del verano.
¿El resultado? Un
impactante CD que, publicado por MALDITO RECORDS, ve la luz en Noviembre de
2012 bajo el nombre de Sacrilegio.
DESPUES DE UN AÑO DE GIRA POR LA PENINSULA
GIRA "PUÑALADAS DE ODIO"
DECIDEN PARAR UNOS MESES Y COMPONER LO QUE ES ULTIMATUM CON SU NUEVA FORMACION